Caminaba por las oscuras calles con velocidad, no
quería detenerse, solamente quería huir. A su espalda comenzó a sentir varios
pasos agiles y apresurados, se acomodo mas su chaqueta y miro de reojo hacia
atrás. Varios sujetos la seguían, no eran lo que habían estado en su casa,
estos tenían más pinta de pandilleros que otra cosa. Cuando doblo en la esquina con un fin de
perderlos, pudo escucharlos casi aullando detrás de ella, la lo tenía más que
claro; la seguían a ella…
La eriza
color rosa casi se helo al sentir como una tosca mano se posaba en su brazo
haciéndola girar bruscamente. Miro asustada el rostro de ese hombre Oso de
color café, a sus lados todos los que lo seguían la estaban encerrando en un
circulo impidiéndola salir. Dio un paso hacia delante al sentir una mano en la
parte trasera de su jean. Esos sujetos comenzaron a reír sonoramente al ver su
temor en el rostro.
-¿A dónde ibas preciosa?-pregunto el más robusto de
todos. Con cierto tono burlón.
-¿Por qué no te quedas a jugar con nosotros?-le dijo
uno de el montón que estaban a su alrededor. Ella lo miro con asco, era
repulsivo, con fuerza junto saliva en su boca y se la lanzo en pleno rostro.
Mientras que elevo su rodilla, pegándole en plena ingle. Aprovecho el poco
espacio que le daba el sujeto, al inclinarse a causa del dolor, para saltarlo y
comenzar a correr. No había huido únicamente para ser atrapada por estúpidos
como esos.
-¿Con que quieres jugar?-lo escucho decir con voz de
pito-¡Atrápenla!-le grito a los que lo rodeaban. Con rapidez, nuevamente, todos
eso sujetos la rodeaban impidiéndola salir. Intento golpearlos pero era inútil,
ellos eran mucho más que ella, además que más fuertes- ¡Me la vas a pagar niña
descarada!- no supo qué hacer cuando vio como ese robusto sujeto le colocaba
una filosa navaja en su cuello, no podía moverse, los demás sostenían con
fuerza sus brazos. Sentía como el frio
de aquel material, le golpeaba fuertemente su cálida piel, cerró los ojos con el fin de no sentir dolor.
Abrió los ojos sorprendida, al tocar fuertemente el
suelo con sus rodillas. Noto como los sujetos que la sostenían estaban tirados
a varios metros de ellos, mientras que los demás miraban con una clara
expresión de horror atrás de ella. No supo cómo pero un gran golpe invisible,
lanzo a los que quedaban varios metros lejos de ella, coloco sus manos en la acera
con terror al ver como lentamente las cabezas y partes de esos hombres, caían
secamente al suelo debajo de un charco de sangre. El oso que la sostenía minutos antes, había
quedado inmóvil ante el terror que se reflejaba en sus ojos, ella lo miro fijamente. Para luego verlo caer
sutilmente al suelo en un seco sonido, sosteniéndose fuertemente su garganta.
Sentía como sus lagrimas corría en sus mejillas ante la masacre que habían
presenciado sus ojos, cerró los ojos con fuerza para evitar que aquellos cuerpos
muertos en el suelo, de alguna manera le hagan recordar a su familia. Detuvo
sus sollozos al sentir como una cálida y suave mano se posaba en su hombro
haciéndola girar hacia atrás.
Ahí fue cuando lo vio, no supo que si temerle o
mirarlo con agradecimiento. Estaba frente a frente con el asesino más buscado
de esa ciudad, sus ojos color dorado, brillaban con intensidad bajo la luz de
la luna de esa noche. Su mirada, tanto como su rostro, no mostraba ninguna
emoción, solamente frialdad. No fue culpable cuando, sus brazos por instinto lo
rodearon por el cuello, a pesar de eso él nunca le contesto esa muestra de
cariño. Estaba frente a frente con su salvador…pero a la vez estaba frente a
frente, con un asesino buscado por toda la ciudad, que posiblemente la podría
matar a ella en ese mismo instante.
Muchos lo
buscaban…pocos habían sido los desafortunados de encontrarlo…Sin embargo para
ella era una bendición encontrárselo, él la había salvado. Sintió como la
empujaba con cierta brusquedad. Para verla con una sonrisa de lado y cierta
burla reflejada en sus ojos.
-¿Qué hace una chica como tú en un lugar como este?-
se quedo hipnotizada al escuchar lo aterciopelada que era su voz, era fría y
ronca pero a pesar de eso le daba una tranquilidad absoluta-¡Te hice una
pregunta!-le grito helándole la piel. Escondió su mirada bajo su flequillo al
recordar el porqué se encontraba ahora en esas calles.
-Hui…hui de casa…-contesto con voz baja y apagada. Él la miro por unos segundos,
para luego darla la espalda y mirarla por su hombro
-Regresa a tu casa. Este no es lugar para alguien
como tu-casi le ordeno poniéndose serio, podría matarla si él quisiera, pero no
quería ensuciar mas sus manos, además de que tenia sueño y quería volver a su
casa. La eriza rosa de quince años, se paro mirándolo decidida.
-Mi padre ha sido traicionada por su mano derecha.
Él y toda mi familia ha sido asesinada por unos hombres de ese maldito-Lo vio
girar su cabeza mirando hacia el frente- No…no saben que yo me pude
escapar…-balbuceo mirando el suelo con tristeza- pero…¡No tardaran en saberlo!
-¿Por qué demonios me estas contando esto?-le dijo
con frialdad. Ella lo miro con determinación, sus púas color plateada
combinaban a la perfección con la luz de la luna.
-El único que puede matar a un asesino es otro
asesino-dijo mirándolo inexpresivo, estaba decidida, condenaría su alma al
infierno con tal de ver derramada la sangre de ese bastardo-Tú eres el mayor
asesino de la ciudad. Por eso quiero que me conviertas en alguien como tú…
-Olvídalo-dijo secamente comenzando a caminara. Ella
frunció el ceño para caminar a su par.
-Por favor-rogo.
-No, no pienso convertirme en una niñera.
-No lo serás- dijo rápidamente- Serás como un tipo de maestro para mí- intento
convencerlo.
-Si quieres un maestro, ve a una escuela. O en tu
caso a un jardín de infantes-acelero su paso, pero era inútil la eriza de ojos
color jade aun lo seguía.
-Por favor…tu no entiendes lo que se siente el
perder a todos los que quieres…-murmuro a punto de llorar nuevamente. Se sorprendió
al notar que aun tenia lagrimas, después de todo lo que había llorado. Lo vio
girarse para mirarla seriamente.
-¿En verdad, deseas ver la sangre del asesino de tu
familia en tus manos?-pregunto, ella lo miro sorprendida. El recuerdo de la
sonrisa de ese sujeto al ver los cuerpos muertos de los integrantes de su
familia, le vino a su mente como una navaja clavada en el corazón.
-Si-contesto con ira y rencor.
-Entonces, de hoy en adelante olvídate de lo que
eres. Olvídate de tu vida actual…-se acerco a su lado con la mano derecha
puesta en su funda, con delicadeza tomo su pequeña mano para así posar el arma
que cargaba en ella, ella lo miro
sorprendida pero a la vez con una clara tristeza en su rostro- Sencillamente,
olvídate de todo…
0...*...0
Hola a todos!!! Bueno aqui les traigo el primer capitulo de este Fanfic, Espero que les agrade. La historia recien comienza por lo que faltan mucho por recorrer....Espero sus comentario y demas...
Bueno, quiero aclarar que esta historia se me vino a la mente, ante la tonta y atolondrada idea de mi mejor amiga Luna...Asi que para ella: ¡¡HE CUMPLIDO LOCA!! XD...Quien sabe de donde mierda saco esta idea, pero tras tanto insistir desidi hacerla. En lo personal a medida que junto con ella, mi mejor amigo Red y mi novio Max. La escribiamos, me identifique mucho y creo que cada uno de ellos tambien....!!
En fin, Aqui comienza la historia creada por el "Cuarteto de los locos" XD....Espero leer sus comentarios..!!! :D
Atentamente su cordial y humilde servidora!!! :)
kiss!!!;)